VIAJE CIUDADES IMPERIALES

El primer día embarcarán y saldrán según previsto en el plan de vuelos. Cuando lleguen a su destino, serán atendidos por un guía de habla hispana. Serán trasladados al hotel previsto donde se les proporcionará cena y alojamiento.

Nota: en el caso de llegar al hotel pasadas las 22 horas, la cena no estará incluida.

Marrakech, tierra de Dios en árabe, fue fundada en el año 1602 por el primer emir de la dinastía bereber, Youssef Ibn Tachfin. Después del desayuno, se dirigirán a visitar distintos monumentos de la ciudad. El primero será el “Minarete de la Koutoubia” que data del siglo XIII, de cierto parecido con la Giralda de Sevilla actualmente, un faro y centro espiritual de la ciudad marroquí. El segundo monumento que visitarán serán las “Las tumbas Saadianas” que datan del siglo XVI, pudiendo observar su bóveda de mármol de carrara. En la tercera visita, visitarán el “Palacio de la Bahia” construido a finales del siglo XIX con doble intención: ser la residencia del antiguo vizir y ser el palacio más grande jamás antes construido. Una vez visitados estos lugares se dirigirán a la “Plaza Jamaa el Fna”, la principal plaza de Marrakech. La gran plaza está rodeada por todos lados, menos por uno, por la medina desde donde salen todas las calle y mercadillos clasificados por su actividad principal. Por la mañana se llena de vendedores donde podrán efectuar, si desean, compras. Se estará por la zona hasta la puesta de sol, cuando la plaza se ilumine de forma única. Al final del día, se dirigirán al hotel para cenar y reponer fuerzas.

A la hora acordada después de desayunar, pondrán rumbo hacia Casablanca. Durante la travesía, cruzarán el Valle de la Chaouia, una de las regiones agrícolas destinadas al cultivo de cereales más importante de Marruecos. Al final del día, se dirigirán al hotel para cenar y alojarse.

El cuarto día visitarán la ciudad de Casablanca, la mayor ciudad de Marruecos con más de 4 millones de habitantes. Está considerada como el centro económico y comercial de Marruecos, combinando sus antiguos edificios del siglo XIII con las edificaciones actuales. Durante la visita, pasarán por la Plaza Mohamed V, distintos barrios como el barrio de Anfa, la Corniche (el paseo marítimo) y el exterior de la Mezquita Hassan II, famosa por su gran techo y su minarete considerado el más alto jamás creado. A la hora acordada, saldrán hacia la capital administrativa del Reino de Marruecos, Rabat. En Rabat verán la Torre Hassan situada en la llanura de la Mezquita con más de 200 columnas y actualmente sin acabar. También, visitarán el Mausoleo de Mohamed V (sultán que consiguió la independencia de Marruecos), el exterior del Palacio Real y finalmente la Kasbah de los Udaya junto con sus vistas a la desembocadura del rio Bouregreg. Más tarde, se dispondrán a visitar Meknes, una de las 4 ciudades imperiales de Marruecos. Meknes se convirtió en una capital bajo el reinado del sultán Moulay Ismail, el fundador de la dinastía alauí. En la ciudad de Meknes, declarada como patrimonio de la humanidad, verán el mausoleo-mezquita de Moulay Ismail, el único edificio religioso que permite la entrada a los de religión no musulmana; y verán los graneros. Al atardecer, realizarán un camino hasta la ciudad de Fez. Al final del día, cenarán y se alojarán en el hotel.

Una vez hayan desayunado, saldrán del hotel para visitar, durante todo el día, la magnífica y mágica ciudad de Fez. Esta ciudad es una de las cuatro ciudades Imperiales junto a Marrakech, Meknes y Rabat. Es la urbe más antigua de las ciudades Imperiales en la que destaca su gran número de mezquitas (785) y su Medina (ciudad antigua), considerándose como la capital del Islam y cultural de Marruecos. En esta visita a la ciudad verán las colinas que rodean la ciudad, las puertas de bronce del Palacio Real y la Medina. En la Medina disfrutarán de la visita a Medersas (escuelas de religión coránica) y talleres artesanos divididos por gremios. Ya acabada la visita, volverán al hotel para cenar y descansar.

A primera hora de la mañana, se desplazarán hacia la ciudad de Ifran conocida por sus casas con afilados tejados de pizarra. Recorrerán el Medio Atlas y sus bosques de cedros pasando por aldeas y ciudades rurales. Durante el recorrido visitarán la ciudad comercial de Benimellal (situada al pie del Monte Tassemit) hasta llegar a Marrakech. Una vez ya en Marrakech, se dirigirán al hotel para cenar y alojarse.

Este día será libre para ustedes, donde podrán visitar la ciudad de forma independiente o apuntarse a otras excursiones propuestas pero voluntarias. La cena será incluida en el alojamiento del hotel.

A la hora pactada, serán trasladados al aeropuerto de Marrakech o Casablanca para coger sus vuelos de regreso.